A pesar de sus gustos por la destrucción, incluso un Rey Demonio se cansa a veces de todo el caos y la sangre que vierten, por ello Anoth se reencarna con la esperanza de tener una vida más pacífica. Sin embargo, 2.000 años después termina asistiendo a clases con sus descendientes en su antiguo castillo. Pero dado el poco nivel de magia existente en esa época, evaluar el verdadero poder de Anoth resulta difícil.